Cuidar la memoria y el ánimo:

salud cerebral en la tercera edad 

Publicado en: 25 de noviembre de 2025  y atualizado en: 2 de diciembre de 2025
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Envejecer es un privilegio — y con él llega el objetivo de vivir más años, pero vivirlos con calidad. En este trayecto, preservar la salud cerebral —es decir, la memoria, el ánimo, la capacidad de concentración y la agilidad mental— se vuelve esencial. Hoy, exploramos cómo cuidar estos aspectos clave para un envejecimiento activo y pleno.

¿Por qué es tan relevante? 

En Chile, la población mayor de 60 años ya representa un porcentaje importante de la población total, y se proyecta que seguirá creciendo aceleradamente.  

En este grupo etario, la salud mental y cognitiva presenta retos importantes. Por ejemplo, un estudio reveló que la prevalencia de depresión en mayores de 60 años es cercana al 39,8 %, lo que equivale a cerca de 1,2 millones de personas.  

Otro análisis encontró que las personas mayores con menor nivel socioeconómico presentan alteraciones en memoria, atención y funciones ejecutivas.   

La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que aproximadamente un 14 % de los adultos de 70 años o más tienen un trastorno mental, y que el aislamiento social y la soledad son factores de riesgo claves.  

Estos datos muestran que cuidar la salud cerebral no es un lujo, es una necesidad para que las personas mayores sigan participando en la vida familiar, social y productiva.

¿Qué podemos hacer para cuidar nuestra memoria y ánimo? 

La buena noticia: hay hábitos y acciones concretas que ayudan a mantener el cerebro activo, el ánimo estable y la memoria en buen estado. Aquí van algunas claves:

1.    Mantenerse físicamente activo
 El ejercicio regular —caminar, bailar, nadar, participar en clases grupales— mejora la circulación, oxigena el cerebro y favorece conexiones neuronales. En Chile, se observó que el 43 % de las personas mayores de 60 años realizan, casi nunca o nunca, actividad física.  

2.    Estimulación cognitiva y social
 Leer, jugar, conversar, tener redes sociales activas reducen el riesgo de deterioro cognitivo. Además, la interacción social mitiga la soledad, un factor de riesgo para depresión y ansiedad. 

3.    Cuidar el estado de ánimo y prevenir la depresión
 Un buen estado emocional favorece que la memoria y la atención funcionen mejor. En Chile, más del 20 % de los adultos mayores presentaban síntomas de ansiedad o depresión según ciertos periodos de estudio. 

4.    Alimentación saludable y control de enfermedades crónicas
 La hipertensión, diabetes, obesidad o dislipidemias impactan también la salud cerebral. Comer variado, con frutas, verduras, cereales integrales y evitar el sedentarismo favorece el rendimiento mental.  

5.    Dormir bien, regular rutinas y evitar aislamiento
 El descanso nocturno de calidad, mantener horarios regulares y vincularse con otras personas son pilares del bienestar mental y cognitivo.

La salud cerebral en la tercera edad involucra memoria, atención, estado de ánimo y vida social — una combinación que define calidad de vida. En Chile, los datos son claros y nos señalan que necesitamos actuar: mantenernos activos, conectados y emocionalmente bien.

Porque en el fondo, envejecer con dignidad significa tener un cerebro que siga acompañándonos, un ánimo que siga alentándonos y una memoria que siga construyendo historias.

Fuentes:  

 

Este material es sólo para fines informativos. No debe ser utilizado para realizar el autodiagnóstico o la automedicación. En caso de duda, siempre consulte a su médico.
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